El pasado viernes, con motivo de la celebración del día de la mujer trabajadora en el C.R.A. La Abadía, concretamente en la localidad de Villaverde de la Abadía, tuvo lugar un concierto de rabel, un instrumento que quiere volver a resurgir en nuestra provincia.
La organización corrió a cargo de la Diputación de León y su servicio de Bibliobus y allí realizó su actuación José Francisco Fernández Juarez, de Villarejo de Órbigo, deleitándonos con romances, coplas, tonadas tradicionales y adivinanzas que pudieron disfrutar tanto los niños del colegio, como profesores y padres.
Aquí os dejo un extracto de su actuación (merece la pena escuchar la historia) que espero que os guste, incluyendo al propio artista y animando al mismo a que nos cuente cómo está viviendo el intento por resurgir de este instrumento en nuestra provincia.
Aprovecho para agradecerle su actuación, la organización de profesores del CRA y empleados del bibliobus y la colaboración de los padres que permitieron que degustáramos sus deliciosos dulces preparados para la ocasión.
Un saludo.
La organización corrió a cargo de la Diputación de León y su servicio de Bibliobus y allí realizó su actuación José Francisco Fernández Juarez, de Villarejo de Órbigo, deleitándonos con romances, coplas, tonadas tradicionales y adivinanzas que pudieron disfrutar tanto los niños del colegio, como profesores y padres.
Aquí os dejo un extracto de su actuación (merece la pena escuchar la historia) que espero que os guste, incluyendo al propio artista y animando al mismo a que nos cuente cómo está viviendo el intento por resurgir de este instrumento en nuestra provincia.
Aprovecho para agradecerle su actuación, la organización de profesores del CRA y empleados del bibliobus y la colaboración de los padres que permitieron que degustáramos sus deliciosos dulces preparados para la ocasión.
Un saludo.
4 comentarios:
¡Qué blog más chulo e interesante! Te descubrí gracias a La Zorrera. Te añado a mis favoritos ya mismo.
Felicidades.
Gracias Ricardo.
A mí me pasó lo mismo con tu blog y supongo que ese nexo se lo debemos de agradecer a La Zorrera.
Ver en la red a gente como mi hermano o sus amigos blogueros, como Tere y tú, me llamó a elaborar una cosilla aquí que espero que algún día alcance, aunque sea de lejos, la calidad de vuestros trabajos.
Un saludo.
José Francisco nos ha hecho llegar lo siguiente:
Instrumento cordófono, frotado con arco, que presenta multitud de formas y donde el sonido se produce por fricción del arco sobre las cuerdas. Usado fundamentalmente en ambientes rurales, especialmente por pastores que a través de la trashumancia lo han llevado consigo de un lado a otro, facilitando su difusión. Se le relaciona con el rebec, instrumento del mismo género que existe en el norte de África y Oriente Medio.
Muy extendido en otros tiempos, comienza su declive hacia la mitad del siglo XX, ya que con la industrialización, el éxodo a las ciudades, y un sentimiento de desprecio hacia todo lo “del pueblo”, ha hecho que llegara a desaparecer.
Es en la zona Sur de Cantabria y en el norte de Palencia donde ha pervivido este instrumento; y así por ejemplo, dos comarcas cántabras: Campoo y Polaciones han dado grandes rabelistas en tiempos recientes.
De la montaña de León (zona de Riaño) proceden varios ejemplares, de distintas formas, por lo que debió existir una gran variedad. Nuestros últimos rabelistas conocidos, fueron Segundo Sierra y Alfredo González (ya desaparecidos) o Nato (que vive actualmente en la localidad de Boca de Huérgano).
Normalmente era el propio rabelista el constructor del rabel, para lo que utilizaba sencillas herramientas, así como el tipo de madera que encontraba. Suele fabricarse a partir del ahuecado de una sola pieza de madera a la que se añade, una vez vaciada, una tapa de madera, piel o incluso hojalata.
Las cuerdas pueden ser de tripa, crin de caballo, metálicas o de materiales sintéticos. Su número, varía entre 1, 2 ó 3, aunque en el intento de imitar los violines han llegado a hacerse con cuatro. Las cuerdas del arco deben impregnarse de resina para producir el mejor sonido posible.
Respecto a la forma de tocar encontramos dos variantes: los que tocan el instrumento sentado, con la caja apoyada sobre las piernas y los que tocan de pie, con la caja del rabel apoyada sobre el pecho. Pero en lo que todo rabelista suele estar de acuerdo es que se trata de un instrumento que acompaña a la voz: el rabelista canta y se acompaña del rabel.
Muchas gracias.
Existe un foro para los rabeles de la peninsula, y donde participan investigadores, etnologos, musicos e interpretes.
La direccion es la siguiente:
http://es.msnusers.com/rabel
Saludos.
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